En los pueblos originarios se manifiesta un sentido de integración con la naturaleza que ha llegado hasta él presente. Siendo notoria la percepción de las comunidades del poder de las fuerzas naturales a las cuales se les tiene presente, en cada acto de vida, porque no han perdido el sentido de vínculo debido en gran parte a que mantienen una forma de vida de subsistencia y relación directa con el territorio que habitan: agricultura, ganadería, pesca, pastoreo.
Y a pesar de que sus miembros se han sometido, a través de los últimos siglos a la convivencia con otros pueblos (conquistadores), no han perdido este respeto, cercanía con quien les da la vida.
Hoy se cuentan, las comunidades indígenas, entre los grupos que defienden y hacen práctica el cuidado del medio ambiente, siendo conscientes del peligro en que se encuentra el planeta y enseñandole a la cultura occidental, la que aun considera a la naturaleza como un reservorio de materias primas para su usufructo y consumo desenfrenado.