Entre el archipiélago de Chiloé y la península de Taitao deambulaban, a la llegada de los españoles, bandas de cazadores-recolectores que fueron denominados genéricamente, chonos. Organizados en pequeños grupos, viajaban sobre canoas de tablas cosidas llamadas dalcas, dedicándose a la caza de lobos marinos, peces y aves, así como a la recolección de mariscos, labor que realizaban las mujeres. Tuvieron contactos culturales con sus vecinos huilliches de la isla grande de Chiloé e incluso, en la zona sur de la isla se mezclaron con éstos formando un grupo mestizo que los huilliches denominaban payos.
Tras la conquista española de Chiloé y el establecimiento del sistema de encomiendas en la isla en 1567, los chonos establecieron vínculos más permanentes con la población chilota. Tras repetidos viajes de misioneros jesuitas a los archipiélagos de las Guaiytecas y Chonos para evangelizar a los indios, un grupo de chonos se estableció en 1710 en la isla Guar, a la entrada del canal de Chacao. Los jesuitas instalaron allí una misión, cuya corta existencia no fue obstáculo para el progresivo mestizaje y aculturación de un pueblo que, ya hacia fines del siglo XVIII, había desaparecido como tal, y se había mezclado con el común de la población chilota.
Documentos: Los chonos. itinerario y aculturación. Rodolfo Urbina.
Lengua: el chono
La lengua de los chonos permanece desconocida. Sólo habrían quedado seis palabras, tres en la obra de Fitz-Roy (13) y tres en el Diario del P. García, respectivamente ( Loukotka, op. cit.:44). Según A. Chamberlain (1913) fue una lengua independiente; según R. Lehmann-Nitsche (1914), perteneció a la familia chon (propuesta por él mismo); P. Rivet (1924) la incluyó en una familia alikulip; Loukotka (op. cit.:Ibid.) en un stock (tronco) aksanás (junto con el "kaueskar or aksanás..."). Según Aguilera, formaría parte -considerando su situación geográfica- de las lenguas fuéguidas (comunicación personal) .
Algunos estudiosos han atribuido origen chono a topónimos que existen en Chiloé, entre los cuales figuran aquellos terminados en -ec (-ek), -ac (-ak), a saber: islas Laitec, Chaulinec, Quenac, Cahuac, Isquiliac; costas de Ichoac, Auchac, etc. (véase Cañas P., 1911, Ibar, 1960).
La lengua de los chonos se extinguió hace ya mucho tiempo.
Documentos: Estado actual de las lenguas aborígenes de Chile. Gilberto Sánchez C.