Portada Anterior Siguiente Índice | 5. Llegada de los Collas a la Cordillera de Atacama

5. Llegada de los Collas a la Cordillera de Atacama


Las primeras migraciones collas a la Cordillera de Atacama -al sur de la quebrada El Chaco- de las que se tiene antecedentes testimoniales, datan de fines de la década de 1870, y para Potrerillos se han reconstruido fechas aproximadas para los años 1877-1878[24]. Algunos de los lugares de procedencia son el Salar de Antofalla, Antofagasta de la Sierra, Salta, Pastos Largos, Potrero Grande, Fiambalá, Tinogasta, Belén y Palo Blanco. Arribaron por el Norte utilizando pasos cordilleranos, en especial el paso del Cerro El Chaco, León Muerto, San Francisco y Pircas Negras-Come Caballos y otras quebradas intermedias existentes entre las serranías[25]. Otros collas atravesaron primero al Salar de Atacama y desde Peine cruzaron el “Despoblado” por El camino del Inca, para asentarse en la Cordillera de Atacama[26].

Las migraciones collas en algunos casos fueron pendulares, es decir, de tráfico ida y vuelta entre la Cordillera de Atacama y el noroeste argentino, y otras tuvieron carácter definitivo para quedarse desarrollando la ganadería, la minería, el arrieraje, el abastecimiento de leña, la caza y la recolección en esta parte del territorio circumpuneño suroriental. Al sector de Potrerillos, llegan las familias Ramos, Quispe, Marcial, Cruz y Jerónimo[27].

Los primeros pobladores que arriban a la Quebrada Paipote, fueron los miembros de la familia Quiroga, descendientes de don Agapito Quiroga. Llegaron de Argentina alrededor del año 1880 para trabajar en el oro del Salar de Maricunga, fijando su residencia en el sector de El Bolo. Posteriormente lo hicieron los Araya, quienes ocuparon la Quebrada de Cortadera, hasta la actualidad: “... mi tío, que fue don Segundo Quiroga, él era el fundador de esto de aquí en la Quebrada de Paipote. De los Quiroga, él era hermano de la finada de mi mamá. Él nació aquí. Todos. Toda la familia fueron nacidos en esta parte. En toda esta quebrada...”. (Paulino Bordones).

También, los collas se instalaron en la quebrada de San Andrés, tributaria de la Quebrada de Paipote las que se unen en el sector denominado San Luis. Allí, se asentaron los Cardozo. “... El primer antecedente al respecto habla que fue su bisabuelo, don Emeterio Cardozo, quien luego de recorrer la zona de Potrerillos, Inés Chica, Inca de Oro y Carrera Pinto, se asentó en San Andrés cerca de la Hacienda La Puerta, hizo potreros y se dedicó a la crianza de animales...”[28].

Otras familias collas como los Quispe, se asentaron en la Quebrada de San Miguel, ubicada al sur de la Quebrada Paipote. Ambas quebradas se unen en las veranadas del Patón y Leoncito en la cuenca alta del río Figueroa y afluente del río Jorquera, camino que fue recorrido por las familias collas para instalarse en las riberas de este último, alrededor de fines del siglo XIX.
“Don Vicente Quispe, (...) colla antiguo de Antofagasta de la Sierra, toda esa familia viene de allá. La mamá se llamaba Santos Cardozo, esa era la mamá de las niñas Quispe, esa es de aquí de San Miguel. (...)Los Quispe venían del Norte, de San Pedro de Atacama, pasaron a Potrerillos y de ahí se venían vega por vega. Manuel Quispe también vivía en la cordillera, muchos años, después empezaron a vivir en el pueblo, a Potrerillos, cuando empezaron a marcar y vender los pocos animales que tenían”. (Paulino Bordones, 67 años, 2 de Noviembre de 1997).

[24] Molina, Raúl y Martín Correa. Informe proyecto “Regularización de Tierras Collas. (Componentes demarcación territorial, catastro de vegas y aguadas, estudio del poblamiento y justificación de la tenencia material de tierras y de la trashumancia colla”. Grupo de Investigación TEPU-CONADI Iquique. (ms.) 1996. Gahona, Alfredo. Estudio Línea de Base Socioeconómica Proyecto Aldebarán. Aspectos Patrimonio Histórico-Cultural. Empresa Minera Aldebarán. Informe Técnico-Manuscrito. 2001. p. 36.
[25] “Los vínculos con Catamarca se perciben más claramente al constatar las recurrencias lingüísticas de los gentilicios y de la toponimia existente entre ambos lados de la cordillera andina” (Manríquez, Viviana y José Luis Martínez. “Investigación Etnohistórica del Estudio Diagnóstico de la Población Colla de la III Región. (Preinforme Final)”. Sur Profesionales Ltda. Departamento de Antropología de la Universidad Academia de Humanismo Cristiano. Santiago. 1995.
[26] Es muy probable que este territorio haya sido frecuentado por la misma etnia colla desde muchas generaciones antes o por sus antecesores directos; quizá remontándose al periodo prehispánico (Atacamas, Diaguitas-Calchaquies y Humahuacas), tanto del lado chileno como argentino.
[27] Paz da cuenta que los apellidos Gerónimo y Quispe se encuentran en la zona de Jujuy, noroeste argentino, y aunque pueden ser más extendidos coinciden con el área geográfica nombrada por la memoria histórica de los collas de Atacama. Paz, Gustavo. “Campesinos, terratenientes y Estado. Control de tierras y conflicto en la puna de Jujuy a fines del siglo XIX”. En: Alejandro Islas (comp.). Sociedad y articulación en las tierras altas jujeñas. Investigación y Desarrollo-Proyecto ECIRA. Buenos Aires.1992.
En efecto, en el caso del apellido Gerónimo, aparece en la subdivisión de la Finca Yoscaba realizada a principio del 1900 (Idelfonso Gerónimo y Polonia Gerónimo), y el apellido Quispe (José F. Quispe), aparece en el Departamento de Yavi, como propietario del predio Quiaca en 1860, y como adjudicatarios en 1903 del rodeo Lumara ubicado en Cochinoca se nombra a Ignacio Quispe y Felipe Quispe. Apellidos Ramos, aunque no coinciden con el lugar señalado por los collas de su origen, si aparecen en la misma zona de Cochinoca. Ver: Castillo, Gastón; Miguel Cervellino y Daniel Quiroz. Los Collas, Fantasmas en la Cordillera. Fondo de Apoyo a la Investigación. Informes. Centro de Investigaciones Diego Barros Arana. DIBAM. Santiago. 1993.
[28] Molina, Raúl y Martín Correa. Estudio e Informe para “Solicitud de Fondos de Valles y Quebradas Ocupadas por las Comunidades Collas, Diego de Almagro, Paipote y Río Jorquera”. Grupo de Investigación TEPU-CONADI Iquique. (ms.). 1997.